El sagrado matrimonio civil.

Realmente, la posición de la Iglesia católica cada vez es más patética, y como siga en esta linea los talibanes afganos a su lado me van a parecer el Circo Chino de Manolita Chen, porque no se puede ser más hipócrita y más descaradamente homófobo.

Si repasamos los hechos que llevan a esta manifestación te llevas una sorpresa bastante curiosa. En el edicto del gobierno se permite el matrimonio entre los homosexuales, si, pero es que ello no afecta en nada a la Iglesia. La Iglesia es una entidad privada, exactamente igual como pueda ser una peña del Numancia, y una de sus actividades es la de hacer bodas de forma legal. Legal mientras tenga el respaldo de una boda civil detrás, claro. Porque uno se casa, si, pero hasta que no queda constancia en el registro CIVIL de la boda, dicha ceremonia no es más que un show de cabaret. En estas circunstancias, el hecho de que el gobierno permita las bodas CIVILES homosexuales no afecta en nada a las bodas por la Iglesia ya que en ningún lugar se obliga a que la Iglesia case a ningún gay o lesbiana. Entonces... ¿Alguien puede explicarme porqué se manifestarán, y encima con los obispos delante? Solo hay una respuesta posible a esa pregunta: homofobia.

Si esa ley no afecta en nada a la actuación de la entidad privada que es la Iglesia, lo que se está manifestando clarísimamente -por más que lo quieran negar los organizadores- es contra la homosexualidad. Contra la homosexualidad y contra la progresiva pérdida de poder terrenal de la Iglesia católica en esta sociedad. Antes hacían y deshacían, y su palabra era ley. Ahora no, su ámbito de actuación ha quedado circunscrito meramente al etéreo reino de la conciencia -esa que tantas veces han pisoteado- y se quejan. Ya no pintan nada, ni en esto, y están dando los últimos coletazos de rabia.

Resulta inconcebible que las leyes de una entidad privada estén por encima de las leyes de un estado, y es exactamente esto lo que los integristas católicos quieren provocar: un matrimonio, si no es como ellos dicen, no es válido y EXIGEN que no sea legal. ¿Quienes son ellos para EXIGIR al estado algo que no les afecta?. De una santa faz granítica, vamos.

La ley de matrimonios gays no afecta en nada a la Iglesia, y sin embargo se manifiestan. Espero que la próxima vez que salga un caso de pederastia entre el clero, también salgan en manifestación los mismos que defienden los derechos de los niños a vivir en "matrimonio heterosexual", para pedir la depuración de responsabilidades.

Posiblemente sea pedir demasiado. Aún hay gente que prefiere a un violador de niños que a dos personas que se quieren.